Nombrar es unirte a lo nombrado
Antes incluso de empezar la clase algo había en el ambiente que ya se presentía, algo mágico iba a pasar.
El silencio nos sobrecogía en un sólo palpitar amoroso, contemplando y sintiendo en lo más profundo cómo Félix, recogido sobre sí y sumido en un sentimiento inefable, parece como arrebatado hacia otra realidad, a otra dimensión, a otro universo… y al tiempo que él se eleva nos eleva a todos y cada uno de nosotros. Algo mágico está sucediendo y todos vibramos en esa energía de Amor y Unicidad.
En su rostro repleto de dulzura y de sus ojos azules como la inmensidad del cielo brotan lagrimas de gratitud, de compasión, de amor. Extiende sus brazos con las palmas de sus manos abiertas y con su voz entrecortada por la emoción, nos dice: “nombrar las cosas con conciencia, porque cuando las nombras así entras en su Naturaleza, entras en su Alma y te haces Uno con lo nombrado…Contempla a un árbol y nómbralo: ¡árbol, árbol, árbol…!, entra en su esencia. Contempla a tu compañero y nómbralo con conciencia; contempla a Jesús y nómbralo: ¡Jesús, Jesús, Jesús…! Sentirás que estás en ellos, sentirás la energía que recorre tu cuerpo y te une a ellos, sentirás que dónde antes había dos ahora solo hay Uno”.
Una aureola de luz lo envolvía en la energía Crística y a nosotros también. De pronto se había creado un algo de otro mundo, sobrecogedor, maravilloso…Nos sentíamos en estado de contemplación mística, arrebatados igualmente, trasladados a otro tiempo y otro lugar en un mismo corazón y con un mismo latido… Mientras, afuera, sobre el jardín, caían copos de nieve blanca formando un manto de vida para las flores en primavera.
Cuánta experiencia vivida en un instante, cuánta memoria recuperada, cuánta luz sobrevenida como un milagro, cuánta presencia silenciosa…En nuestra intención un motivo, en nuestra siembra una intención, en el sentido de la Vida un propósito y en nuestras almas Unicidad, que es Amor.
La Vida es la Historia de Amor donde el Atman nombra a Dios para reconocerse en Él.
Un eterno abrazo
Gracias Maria ! Es como si hubiese estado alli con vosotros ….., gracias!
Abrazos
Sí María, no hay palabras para describir lo vivido. Gracias al Universo por habernos dado la oportunidad de vivir esta experiencia maravillosa.
Un abrazo.
Gracias María, es verdad que se vive así en el aula, es una comunión en todo y con todos. Todo esto lo hace el observador que con su conciencia y voluntad puesta en nosotros y nosotros en él, se produce el MILAGRO. En nuestro grupo, cuando Félix hablaba del AMOR de DIOS en todo lo manifestado, el viento fuera silbaba y su sonido era siiiiiiiiii, siiiiiiii, fue precioso.
Gracias María por transmitirnos vuestros sentimientos.
Gracias María, por compartir …..es verdad que en las cases con Félix siempre se viven momentos mágicos……
MUy bello y hermoso, como el AMOR María GRACIAS, GRACIAS, asi es Félix…
Gracias María. Al leer lo que has escrito siento que no encontrarme físicamente entre vosotros no impide vivir la experiencia, que permanece en un espacio del alma a la que no afecta tiempo ni espacio: Tu corazón ha traído esa vibración amorosa a mi corazón que siento lleno de amor y agradecimiento. Siento el instante donde el Alma se reconoce en esa Presencia silenciosa y se hace milagro. Os reconozco como esa medida buena, apretada, remecida y rebosante de Amor que pone Jesús en el regazo de quien da, como tú.
Gracias Maria….el corazón es un santuario de silencio…y ahí en el silencio se produce el milagro….gracias
Impresionante,María ,gracias por compartir esa experiencia,me ha emocionado tan profundamente que he sentido en el corazón cada una de tus palabras,palabras vivas, llenas de energía de amor ,y me he sentido viviendo esa experiencia con vosotros…Almas unidas participando de todo ello…
¡Gracias!!!
Gracias Maria por expresar tan bien un sentir que es de todos.
Gracias Maria….Felix nos hace sentir que somos ¡¡¡el Discipulo Amado¡¡¡, a traves de el…cuanta Magia¡¡¡
Gracias María,tus palabras reverberaban en mi pecho.Con cada nuevo texto que enviáis, siento como se eleva vuestro espíritu y así eleváis el nuestro.Gracias Felix.
Gracias María, cuanto amor, es como si hubiera estado allí con vosotros! Un abrazo
Gracias María por compartir de una forma tan preciosa la experiencia sublime vivida ese fin de semana.. es verdad, cuánta memoria recuperada.. cuanta “presencia”..
Gracias cariño, lo has expresado de maravilla, con el corazón..
Maria, no tengo palabras para agradecerte el Amor que desborda tu sentir. Gracias por esa manera tuya, maravillosa y dulce, de expresar lo vivido. Cuanta Luz sobrevenida, cuanta presencia …
Una abrazo de corazón
Precioso Maria y escrito desde la dulzura del corazón. Un abrazo.
Maria gracias,con tú precioso relato he revivido las emociones sentidas que a todos nos traslado a otro lugar, el reino del amor
Un abrazo en el Alma
María queremos mandarte nuestra gratitud y nuestro amor , nos has hecho sentir en esa unicidad , y no hay palabras para agradecerte a ti y a todos los que hacéis posible que podamos compartir esta unicidad , os sentimos familia y estamos con vosotros ” Familia” Un abrazo infinito